Este bizcocho tan bonito fue resultado de una apuesta con una amiga. Me tentó a que intentara hacerlo y yo, ni corta ni perezosa, me puse manos a la obra. Es un simple bizcocho de yogur, sustituyendo el aceite por mantequilla, para cambiarle la textura, y la parte de arriba simplemente claras montadas a punto de nieve, mezcladas con coco rallado y... apuesta ganada. Por cierto, aún me debes ese café, ¿no?
lunes, 3 de mayo de 2010
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QUÉ PINTAZA!!! ¿CUÁNDO LO VOY A PROBAR??
ResponderEliminarNo sé por dónde andas ahora. Llámame cuando regreses y preparamos un bizcocho de coco y chocolate con un buen latte macchiato. ¿Te apuntas?
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